miércoles, 25 de febrero de 2009

¿Qué eres? (Parte I)

Se miró al espejo y sonrió. Aquel vestido sí, ese era perfecto. Incluso se sintió guapa. El vestido era negro y le llegaba hasta las rodillas, le dejaba los ombros descubiertos, y los zapatos de tacón estilizaban su figura. El color oscuro de la prenda resaltaba el tono rubio de su largo y ondulado pelo. Lo único que no le gustaba de su rostro eran sus ojos, porque los tenía de color chocolate, y siempre los había querido azules; pero es globalmente conocido que la perfección no existe.

Salió de su habitación y bajó al salón, donde estaba él, el chico al que amaba con todo su corazón y que le había pedido que fuese al baile con él. Se llamaba Francisco.
-Estás preciosa, Ariadna.
Las mejillas de la chica enrojecieron. Él sonrió.
-Gracias. Tu también vas muy elegante.
Llevaba un traje negro con una camisa blanca y una corbata.
-Vamos conjuntados - dijo él riendo.
-¿Voy a cambiarme? - dijo Ariadna, un tanto preocupada por si ir conjuntado era bueno o malo.
-No, por dios; así estás perfecta.
Los ojos de Francisco brillaban de admiración, pero al contrario que Ariadna, tenía los pies en el suelo.
-¿Nos vamos?
La chica asintió y salió por la puerta de entrada que Francisco le había abierto. No tuvo que despedirse de nadie porque sus padres habían ido a cenar en un restaurante con unos amigos.
Los dos jóvenes subieron al coche del chico: un BMW serie 1 de color azul metálico. A nuestra protagonista le encantaba ese coche.

Hubo momentos de largos silencios, en los que los chicos pensaban en sus cosas. Pero cuando estaban a punto llegar a su destino Francisco habló.
-Ariadna.
-¿Sí? - dijo, girándose para mirar el chico.
Hubo una pausa.
-Ya sé que vamos al baile juntos y eso, pero me gustaría que fuésemos como una pareja formal.
Ya habían llegado al párquing del pavellón deportivo donde tenía lugar el baile. Ariadna no dijo nada, sólo miraba a su acompañante, sonrojada y nerviosa. Él aparcó el coche y la miró.
-¿Quieres salir conmigo?
Una amplia sonrisa se dibujó en los labios de la chica.
-¡Sí!
Francisco también sonrió, y muy lentamente se fue acercando a ella, hasta que finalmente sus labios se fundieron en un tierno beso. Estuvieron algunos minutos allí, hasta que decidieron salir del coche y dirigirse al pabellón. Iban cogidos de la mano. Algunas personas los miraban y luego miraban sus manos unidas, pero eso no les importaba.
-¡Ari!
Clara, su mejor amiga, la miró con ojos atónitos y con una gran sonrisa.
-¿Y eso? - dijo, dirigiendo sus ojos a Francisco y su mano.
-Pues ya ves.
Los tres rieron.
-Bueno, ya nos veremos más tarde. O no...
Y se fue a encontrar a su novio.

Bailaron hasta más no poder, y Ariadna le pidió al chico que se sentaran un rato. Francisco le dijo que le esperara allí mientras él iba a por algo de beber. Cuando el chico se fue, ella vio que su mejor amiga estaba en el parque posterior del recinto; y un chico que no era su novio estaba con ella, y parecía que se peleaban. Buscó con la mirada a Francisco, pero no le vio por ninguna parte, así que salió. Clara no estaba donde la había visto, pero pronto oyó su voz y la siguió. Llegó hasta el bosque de al lado, donde había muchísimos árboles; pero todavía oía su voz, aunque no la entendía, y siguió. Antes de darse cuenta de ello estaba perdida en medio de la espesor del bosque. Sintió miedo, y ahora no oía nada.

-Hola, Ariadna.

Una voz lúgubre emergió de entre las sombras. La luz de la Luna descubrió su rostro: era muy pálido, y tenía los ojos rojos como la sangre; y dos colmillos que salían de su mandíbula superior.

-¿Quién eres?

-Un viejo amigo tuyo.

El desconocido se acercó lentamente a ella.

-No me hagas nada, por favor.

-No puedes ir provocando de esa forma y después pedirme eso. En el fondo te mueres de ganas.

Ariadna daba pasos hacia atrás, pero las piernas del vampiro eran muy largas, y avanzaba más que ella podía alejarse.

-¡Ariadna!

La chica se volteó, y vio que Francisco estaba allí, y que corría hacia ella. Cuando vio al vampiro se enfureció, y de un golpe le tumbó. Mantuvieron una pelea difícil de seguir por unos ojos humanos como los de Ariadna; así que casi no se dio cuenta de que Francisco había matado al vampiro.

-Espérame aquí.

La chica no se movió; y el joven se llevó el cuerpo del desconocido.

Cuando volvió, ella no se había movido ni un centímetro.

-Te llevaré a casa.

Pero Ariadna no se movió.

-¿Qué eres?

10 comentarios:

  1. Ah, estuvo maravilloso... y esa última pregunta, fabulosa, estremecedora... me encanta, sí, sí... continua, te lo imploro. Noto que me he vuelto demasiado aficionado a las lecturas de blogs como para prestar atención a los libros. Será que hay muy buenas propuestas... en mi blog hay un pequeño fragmento de mi novela, ¿me harías una crítica? Pero no seas muy mala... chao.

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  2. Hola...
    Estuvo excelente, magnifico. Primera vez que leo un texto tuyo, pero me parecio muy bueno. Sigue! que quiero saber que pasa luego.

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  3. Me acerqué curioseando. Espero que sigas con el relato. me situé en el bosque. Me dió intriga.
    te dejo un beso,

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  4. Intrigante!!! quien es Francisco en realidad? nos has dejado con todo el misterio... Continua! besos.

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  5. woooooo me encanta!! ademas me flipa como has terminado dejando la pregunta sincontestar.. flipante! de nuevo la carne de gallina!
    sigue pronto con tus relatos! son cañeros!
    un beso
    Angi

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  6. Me ha gustado bastante lo que he leído. Lo mejor de todo es que no he podido dejarlo hasta llegar al final (y eso es algo muy positivo). Coincido con los demás en que ha sido todo un acierto dejar esa pregunta en el aire; hace que desees leer esa continuación.

    Sigue así y vuelvo a animarte para que me envíes algún pequeño relato para mi blog de escritores en la sombra.

    un abrazo

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  7. Wow... primer relato que leo de tu blog, y quede con la duda enorme, y las ganas de segir leyendo...
    sigue asi, ese toque de misterio causa el efecto.
    seguiremos tu blog =)
    suerte

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  8. Qué importa que sea, lo importante es que la proteja :)

    Beso :)

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  9. Me ha gustado mucho el relato. ültimamente estoy leyendo unas cosas muy buenas. Hasta me dan un poco de envidia. Tiene intriga, y una dosis de pasión que es como a mí me gusta.
    Muchas gracias por pasarte por mi blog.
    Saludos desde La ventana de los sueños, blog literario.

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  10. Hola!

    Bonito texto con final abierto o ¿piensas escribir una continuación? Creo que no le hace faltar saber qué es, si ya le conoce y le quiere, aunque la curiosidad podría conmigo.

    Volveré a pasarme por aquí.

    Cuídate!!

    Omega

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Os agradezco muchísimo que comentéis =D
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También me gustaría que criticáseis mis relatos (de forma constructiva), y que los valoráseis en las casillas que están al final de cada entrada.

Muchísimas gracias y un beso muy grande!!

PD_leeré todos los comentarios y me pasaré por vuestros blogs ;)